Aromaterapia

   

    Aromaterapia   


La aromaterapia es un antiguo arte que se incorpora a esta época de vida de cambios veloces y vida acelerada. Esta disciplina aporta un uso terapéutico de los aromas puros para un tratamiento natural y un complemento importante para ayudar a restablecer nuestro equilibrio y armonía.


Todo olor produce una sensación, una percepción, recuerdos de ciertos momentos o personas especiales.


El ser humano es capaz de detectar hasta diez mil olores, pero las estructuras olfativas se van degenerando con la edad. Los niños suelen distinguir más olores que los adultos.


La nariz se desarrolla aproximadamente desde la semana 11ª a la 15ª de gestación. Incluso antes de que esté completamente formado, el bebé ya es capaz de responder a la presencia de distintos olores.


El olfato es uno de los cinco sentidos con el cual se perciben los olores, encargado de detectar y procesar los olores. La nariz, equipada con nervios olfatorios, es el principal órgano del olfato. Los nervios olfatorios permiten diferenciar el gusto de las sustancias que se encuentran dentro de la boca. Es decir, muchas sensaciones que se perciben como sensaciones gustativas, tienen su origen, en realidad, en el sentido del olfato. El olfato y el gusto están interrelacionados, y esto explica por qué el olfato participa en la estimulación del apetito y las secreciones digestivas. Además el olfato actúa como un detector que nos advierte de peligros como los gases tóxicos, venenosos o los alimentos en descomposición.


El olfato es un sentido químico, en el que actúan como estimulante las partículas aromáticas u odoríferas desprendidas de los cuerpos volátiles, que ingresan por el epitelio olfativo ubicado en la nariz, y son procesadas por el sistema olfativo. La nariz distingues más de 10.000 mil aromas diferentes. Es el sentido más fuerte al nacer, mediante el cual un bebé puede reconocer a su madre.


Las sustancias odorantes son compuestos químicos volátiles transportados por el aire. Los objetos olorosos liberan a la atmósfera pequeñas moléculas que percibimos als inspirar. Estas moléculas alcanzan la mucosa olfativa, que consta de tres tipos característicos de células: las células olfativas sensoriales, las células de sostén y las células basales. Los 20 o 30 millones de células olfativas humanas contienen, en su extremo anterior, una pequeña cabeza con cerca de 20 pequeños filamentos sensoriales (cilios). El moco nasal acuoso transporta las moléculas aromáticas a los cilios con ayuda de proteínas fijadoras, los cilios transforman las señales químicas de los distintos aromas en respuestas eléctricas.


Las prolongaciones nerviosas de las células olfativas alcanzan el bulbo olfatorio a través de micro-orificios del cráne, el bulbo es una porción anterior del cerebro, que se ocupa de la percepción de los olores. Estas prolongaciones nerviosas terminan en glomérulos, pequeñas agrupaciones celulares esféricas donde se procesan las señales aromáticas que luego son conducidas por células receptoras especiales. La información llega primero al sistema límbico y al hipotálamo, regiones cerebrales responsables de las emociones, sentimientos, instintos e impulsos, tales regiones almacenan también los contenidos de la memoria y regulan la liberación de hormonas. Por este motivo, los olores pueden modificar directamente nuestro comportamiento y las funciones corporales.


La palabra "aroma", usada por los griegos para nombrar a las especias, significa fragancia y "terapia" es sinónimo de tratamiento. De ahí que la terminología Aromaterapia se entiende como el uso terapeútico de aceites esenciales extraídos de las plantas, los cuales proporcionan la fragancia a las plantas y sus efectos curativos sobre el cuerpo y la mente.


Los aceites esenciales poseen muchas propiedades que provocan estímulos en el ser humano y se convierten en un invalorable elemento de bienestar. 


Los aceites esenciales son químicamente complejos, un aceite puede contener entre 50 y 500 sustancias químicas diferentes, y poseen un gran número de propiedades medicinales. Pueden dilatar o constreñir los vasos sanguíneos, servir como sedantes o estimulantes, y actuar sobre las gládulas suprarrenales, los ovarios, la tiroides o en el proceso de digestión.


El uso de esencias es de tiempos remotos y tiene referencias en todas las culturas y religiones. En la antigüedad, los egipcios hace 40 siglos A.C, hacían preparados con aceites esenciales que se utilizaban en medicina, cosmética, baños, y para armonizar los templos.


Los egipcios iniciaron el arte de extraer las esencias de las plantas calentándolas en recipientes de arcilla, fueron los alquimistas griegos quienes conservando la fragancia y las propiedades curativas inventaron la destilación para obtener aceites esenciales. El uso de aceites esenciales se realizaba desde hace milenios en China, India y Persia. Los vedas también utilizaban aceites para su medicina.


La aromaterapia vive ultimamente un gran auge en los países occidentales, siendo objeto de numerosas investigaciones por laboratorios de cosmética. Se usa cada vez más por médicos como terapia complementaria. Ese redescubrimiento de los aceites esenciales, en especial de los aceites ecológicos, se inscribe también en la preocupación creciente de muchas personas de usar productos respectuosos de la naturaleza y libres de químicos potencialmente tóxicos para el organismo.


Aunque todos los aromas los percibimos a través de la nariz, el cerebro se encarga de reconocerlos y clasificarlos, poniendo a funcionar lo que se ha dado en llamar "memoria olfativa", la que a su vez genera emociones y recuerdos. De esta manera, al percibir determinado aroma es posible emprender un viaje al pasado, recordar alguna etapa o persona relevante en nuestra vida, o bien, situarnos en un lugar al que sólo hemos ido una vez.


En situación de debilidad física, o hasta de enfermedad, es posible a través del olfato procurarse la curación, utilizando las esencias aromáticas o los aceites esenciales, que contienen substancias altamente benéficas como un medio complementario para ayudar al individuo en diferentes situaciones.


Estas esencias florales no son nocivas ni crean hábito, y no se les conoce efectos secundarios. Han sido empleadas para modificar estados de ánimo caracterizados por sentimientos de miedo, preocupación, ira y depresión, los cuales pueden llegar a provocar enfermedades o impedir una recuperación normal. Las esencias trabajan sobre la vertiente emocional de la persona enferma y le ayudan a transformar las actitudes negativas en positivas. Una actitud positiva permite que el cuerpo se defienda mejor de las enfermedades físicas y alivia el estrés emocional.


    Acción de los aceites esenciales


La memoria asociativa de aromas y situaciones generan el aprovechamiento de los aceites para uso terapéutico, dado que la conciencia registra el aroma con la ambientación.


La aromaterapia actúa sobre los planos sutiles, por ello puede ser utilizada como terapia vibracional, también ayuda a la meditación, visualizaciones, concentración, afirmaciones y a todas aquellas técnicas destinadas a buscar el equilibrio y armonía interior.


Las esencias producen cambios en las funciones normales del organismo y restablecen la armonia perdida. Los aceites esenciales no restauran por sí solos la integridad normal de las células, pero estimulan los procesos orgánicos y revitalizan los sistemas u órganos en los que existe alguna disfunción.


Al ser inahalados, pasan a través de las fosas nasales y estimulan el nervio olfativo, que conduce al estímulo hasta diversas zonas del cerebro, desde donde ejerce una acción sobre el sistema neurohormonal que puede ser estimulante, inhibidora, irritante o normalizador. Si estimulan el lóbulo temporal, tienen efectos en la memoria, la concentración y el aprendizaje. Si llegan al tálamo, inciden en las emociones. Si estimulan el hipotálamo, este actúa sobre la hipófisis, glándula que, a su vez, lo hace sobre las hormonas del organismo.


Los aceites esenciales actúan en el organismo por tres mecanismos. Al entrar en el cuerpo se combinan con hormonas y enzimas, provocando un efecto farmacológico. Como respuesta a esta interacción se produce un efecto fisiológico, que puede ser de estimulación, sedación o tonificación. La tercera acción afecta al ámbito de las emociones y sensaciones que se asocian al arona del aceite esencial, es el efecto psicológico.

    Meditación


Los aceites se usaron desde tiempos remotos para la meditación y rituales religiosos, también para muchas culturas los aromas se utilizaban como ofrendas a los dioses. Para meditar con aceites podemos lograr:


· Purificar y preparar el lugar para meditar. 

· Ayudar a aquietar la mente de pensamientos cotidianos. 

· Profundizar y serenar la respiración.

· Conseguir claridad mental

· Balancear los chakras. 

· Llevar la energía a tierra.

· Armonizar la energía de un grupo.

 

     El poder terapéutico de la aromaterapia


Los principios activos de los aceites esenciales tienen potentes efectos curativos sobre el organismo y las emociones negativas. Se trata de componentes químicos con probados beneficios terapéuticos, que, en muchas ocasiones, han sido sintetizados en laboratorios para convertirlos en fármacos. Sin embargo, en los aceites esenciales que se utilizan en aromaterapia, los principios activos son naturales y penetran en el organismos de diferentes maneras, en función de como los apliquemos.


     Propiedades mágicas y curativas de los inciensos y las esencias 


La energía que yace tras las flores, especies y maderas olorosas es un regalo de la naturaleza. Las fragancias alegran el corazón y dan gozo y placer a nuestros sentidos.


Albahaca: Se utiliza para el dolor de cabeza y migrañas. Alivia la fatiga mental, estimula las funciones cerebrales, despeja la mente, amplía la memoria, la concentración y la habilidad para tomar decisiones. Alivia la depresión. Es energizante. Contraindicado en mujeres embarazadas y en período de lactancia debido a la presencia de estragol, que puede tener efectos carcinogénicos sobre el feto.


Alcanfor: Protege de accidentes provocados bajo los auspicios de aries. Saneamiento de lugares. Atrae sueños proféticos. Limpieza de larvas astrales. es un buen antiséptico. Se utiliza como sedante y tónico.


Ámbar: Prosperidad, mejora las situaciones en general. Trasmuta las energías. Serenidad. Atracción y fidelidad. Elimina obstáculos y roces. Elimina resentimientos y rencores.


Azahar: Afrodisíaco, amor. Alegría. Suerte. Dinero. Meditación. Provoca sueños que liberan las tensiones emocionales del subconsciente.


Azucena: Paz. Calma el dolor producido por las rupturas sentimentales. Madurez. Realización de proyectos.


Benjuí: Purificación. Prosperidad. Paz. Creatividad. Desarrolla las cualidades intelectuales. Aumenta la comprensión. Desarrolla la intuición. Ayuda a la estabilidad emocional. Protección de brujería y hechizos. Efectivo para el dolor de garganta, la pérdida de voz, en casos de gripe y resfriados.


Bergamota: Eleva el espíritu, refresca y relaja. Es muy útil para casos de depresión, ansiedad, tensión y preocupación. Promueve la confianza, el valor y el discernimiento. Tiene un efecto equilibrante. Ayuda a conciliar el sueño. 

Regula el ciclo menstrual y alivia el síndrome pre menstrual, además de los síntomas causados por la menopausia.

Contraindicado en pieles sensibles. No utilizar previo a la exposición solar o rayos UV, ya que es una esencia fotosensible que puede provocar manchas e irritaciones en la piel.


Canela: Es afrodisíaco y atrae el amor. Protección. Curación. Otorga energía al cuerpo. Estimulante mental. Aumenta la capacidad de penetrar en nuestra conciencia psíquica. Da seguridad. Mejora la economía.

Terapéuticamente es un excelente antiséptico y antifúngico. Indicado en casos de picaduras de insectos, emplastos para gripes o resfriados y micosis.


Cedro: Su aroma crea un ambiente relajante, sedante y equilibrador, que favorece la reflexión, reduciendo al mismo tiempo el estrés y la tensión. Elimina los bloqueos físicos. Favorece el control sobre la vida propia. Fomenta la espiritualidad. Devuelve el equilibrio. Limpieza y purificación de ambientes. Prosperidad. Bueno para los negocios. 


Cedrón: sedante se combina con lavanda. 

Purifica el aire y facilita la respiración profunda por lo que ayuda en casos de catarros y resfriados. Indicado para las afecciones catarrales y casos de bronquitis crónica, por su acción mucolítica.

Contraindicado en casos de embarazo, hipertensión, cardiopatías y epilepsia.


Ciprés: Aporta paz, confort y fortaleza. Alivia la ansiedad y el estrés que acompañan principalmente períodos de cambio y transición. Ayuda a la concentración. Equilibra el sistema nervioso.Por su acción antiespasmódica, es útil en casos de asma y de bronquitis. Es un desodorante natutal, adecuado para baños de pies. efectivo repelente de insectos.

Contraindicado en mujeres embarazadas y en período de lactancia.


Clavo de olor: Estimula la mente y la memoria, mejora la respiración, ayuda a superar los estados de agotamiento, aunque en dosis excesivas puede ser soporífero. Aporta fuerza, valor, seguridad y determinación. Agotamiento mental para dejar de fumar.

Tiene propirdades analgésica, antiespasmódica, antiviral, tonificante y es un poderoso antiséptico. Efectivo repelente de insectos.

Contraindicado en mujeres embarazadas y en período de lactancia. No aplicar directamente sobre la piel ya que puede causar irritación.


Copal: Protección. Limpieza de personas y hogares. Potencia los rituales para que sean eficaces.


Enebro: Actúa sobre los planos mentales, emocionales y físico, alivia situaciones de confusión y cansancio. Crea un ambiente ligeramente euforizante y con efecto antiestrés.

Tiene propiedades analgésicas, antiespasmódicas, antisépticas, antivirales, calmantes, desintoxicantes, equilibradores, estimulantes, revitalizadores, sedantes y tonificantes. Alivia dolores musculares, estados febriles y reumáticos.

Contraindicado en mujeres embarazadas y en período de lactancia. No aplicar directamente sobre la piel ya que puede causar irritación.


Eucalipto: Actúa en el aparato respiratorio, es descongestivo, efectivo emplearlo en inhalaciones o en gotas sobre la almohada para tratar infecciones respiratorias, gripes, catarros, fiebres, congestiones y otros problemas respiratorios. Fomenta la salud. Acelera los procesos de curación. Estimula la circulación, utilizado en masajes alivia dolores musculares y artríticos.

Purifica la energía negativa de las personas y lugares, elimina las bacterias en el aire. Protección. Éxito. Prosperidad.

No aplicar directamente en la piel ya que puede causar irritación.


Geranio: Alivia la ansiedad, la aprensión, la depresión, los estados de humor cambiantes y el desequilibrio emocional. Por su efecto equilibrante, estimula o seda dependiendo de las necesidades individuales.


Incienso: Aplaca la ansiedad, la agitación, la excitabilidad y purifica el aire. Indicado para problemas respiratorios, es uno de los mejores antisépticos pulmonares que calma la tos y es efectivo para tratar el catarro bronquial.Tiene propiedades antisépticas, astringente, tónico, cicatrizante y equilibrador.

Adecuado para las reglas pesadas aplicado en forma de baños o masajes abdominales.

Meditación. Protección. Energía. Poder. Fuerza. Limpieza de ambientes. Purificación. Conexión con las vibraciones altas. Otorga energía personal.


Jara: Evita la soledad. Muy beneficiosa para conseguir la integración de grupos sociales. Restablece la conexión entre el cuerpo y el alma despertando el verdadero ser interior.


Jazmín: Afrodisíaco. Atrae la buena suerte en el amor. Abundancia. Alivia la depresión. Calma los nervios. Relaja el cuerpo. Elimina las preocupaciones respecto al futuro. Favorece la autoestima. Eleva el espíritu. Equilibra toda la esfera psíquica.

El aceite de jazmín se ha asociado tradicionalmente a la feminidad, regularizando la menstruación y combatiendo la frigidez.

Contraindicado en mujeres embarazadas y en períodos de lactancia.


Jengibre: Es considerada una fragancia afrodisíaca. Crea un ambiente reconfortable y envolvente.

Mejora la respiración y transmite una sensación de energía y seguridad. Alivia dolores reumáticos y musculares, agotamiento sexual y físico. Mejora la circulación y transmite una sensación de calor.

No aplicar directamente en la piel ya que puede causar irritación.


Lavanda: Es un sedante muy efectivo, se utiliza en problemas de insomnio. Ayuda a balancear estados emocionales como histerias y depresiones, calma, relaja el sistema nervioso. Alivia los dolores de cabeza, los dolores musculares, artríticos y el estrés. De poderosa acción antiséptica y antibacteriana. Efectiva para alejar a los insectos. Útil contra quemaduras e infecciones, mordeduras de insectos, pié de atleta y otros problemas de la piel.

Regula el ciclo menstrual y alivia el síndrome premenstrual.

Es empleado para tratar problemas respiratorios como el asma, la bronquitis, la gripe, el resfriadoy la irritación de garganta.

Felicidad. Amor. Armonía. Paz. Favorece el amor espiritual. Armoniza la energía espiritual y produce equilibrio. Claridad de ideas. Limpieza. Purificación.


Laurel: Clarividencia. Adivinación. Energía. Poder. Fuerza. Inspiración. Sabiduría. Meditación. Protección. Purificación. Limpieza. Exorcismos.


Lemongrass: Se usa en la fatiga mental es un estimulante mental.


Lila: Aumenta el amor. Purifica personas y ambientes. Potencia la tolerancia. Ayuda a ser más flexibles con nosotros mismos y con los demás.


Limón: Aporta vitalidad al cuerpo, genera alegría, buen humor y optimismo. Favorece la concentración, reduce la ansiedad, la depresión y la confusión.

Fortalece el sistema inmunológico, tiene propiedades antisépticas, astringentes, cicatrizantes y desinfectantes. Conserva la salud. Favorece las energías positivas. Calma los nervios y alivia el estrés. Calma el picor de las picaduras de los insectos.

Contraindicado previo a la exposición solar ya que es una esencia fotosensible que puede provocar muchas irritaciones en la piel. Evitar su uso prolongado en caso de baja presión sanguínea.


Loto: Felicidad. Armonia. Paz. Energía. Poder. Fuerza. Creatividad. Éxito. Fortuna. Justicia. Consagración.


Mandarina: Calmante y sedante, alivia el estrés, promueve el sueño pacífico, efectivo en casos de insomnio y tensión nerviosa.

Contraindicado previo a la exposición del sol ya que es una esencia fotosensible que puede provocar manchas e irritaciones en la piel.


Manzanilla: Genera un ambiente tranquilizante, relajante, calmante y sedante. Indicado en casos de nerviosismo, insomnio, mal humor y migrañas. También es indicado para tratar la sinusitis y alergias de las vías respiratorias.

Éxito. Fortuna. Justicia. Protección. Provoca sueños placenteros.    

Es uno de los aceites esenciales que se pueden usar en niños pequeños y durante el embarazo.


Mejorana: Aconsejable en casos de tristeza, sensación de pérdida, actúa mejorando estados de soledad y ansiedad. También en casos de insomnio y cefalea, para lo cual se emplea en baños relajantes.

No excederse a su uso, a riesgo de causar un excesivo relajamiento o una sensación de embotamiento. No utilizar durante el embarazo.


Melisa: Contra el insomnio, cefaleas y traumas psíquicos.Es antidepresivo, calma los temperamentos nerviosos y ansiosos. Devuelve el equilibrio emotivo.

Atenúa las llamaradas de calor de la menopausia.

Facilita la respiración en casos de asma.


Menta: Estimula el sistema nervioso y favorece la concentración, se aconseja para despejar la mente y estimular la creatividad. Contra el agotamiento, tiene efecto revitalizante, despierta el entusiamo. Ayuda a despejar la energía negativa en personas y espacios. Calma los nervios en situaciones de shock o histeria. Reconforta ante la pérdida de un ser querido. Ayuda a afrontar nuevos cambios. 

Indicado para dolores de cabeza y náuseas. Alivia fiebre y resfriados. Usado en masajes, ayuda en los problemas musculares, artríticos y dolores menstruales. 

Una gota diluida en agua es un excelente antiséptico bucal.

Refresca la piel por su alto contenido natural en mentol. Se puede añadir al baño para tonificar y estimular la piel, pero en poca cantidad ya que genera una sensación fría en la piel.


Debido a su alto contenido en mentol, el aceite de hierbabuena es un agente irrigante común y no se recomienda su aplicación en pieles de bebés o niños de menos de dos años. No usar durante el embarazo. También deben evitar su utilización las personas con piel delicada o sensible.


Mirra: Protección. Meditación. Limpieza de personas y lugares. Aleja energías negativas. Aleja malos espíritus. Purificación.

No se debe usar durante el embarazo.


Naranja: Su aroma es cítrico, refrescante y dulce, el cual crea ambientes tranquilizantes que ayuda a que se desvanezcan las preocupaciones. Indicado en casos de depresión y desgano, provoca alegría, entusiamo y confianza.

Tiene efectos antiespasmódicos, antivirales, calmantes, generan calor, revitalizadores y sedantes. Adicionalmente fortalece el sistema inmunológico.

Contraindicado previo a la exposición del sol ya que es una esencia fotosensible que puede provocar manchas e irritaciones en la piel.


Nerolí: Es antidepresivo, antiséptico, antiespasmódico y afrodisíaco. Especialmente indicado para estados de ansiedad, por su efecto sedante suave. Efectivo en casos de insomnio.


Orégano: Aumenta la claridad del subconsciente. Relaja tensiones y preocupaciones espirituales. Potenciación de negocios. Purificación de personas y ambientes. Amor. Protección.


Orquídea: Afrodisíaca. Combate la impotencia de hombres y mujeres. Conecta con otras dimensiones y realidades. Concentración. Facilita entrar en trance. Activa y recupera los poderes psíquicos. Meditación. Poder. Fortuna. Belleza. Amor. Salud.


Patchouli: Presenta un aroma sensual y afrodisíaco. Crea una atmósfera oriental, sedante y antidepresiva. Reduce la apatía, sin excitar, favoreciendo la reflexión.

Es un efectivo repelente de insectos.

Tiene propiedades desodorantes, cicatrizantes, antinflamatorias, antifúngicas, antisépticas y depurativas.


Palo de rosa: Su aroma genera un efecto sedante, equilibrador, euforizante, seductor y aumenta la creatividad. Tiene leves efectos afrodisíacos. Aporta bienestar integral en el organismo, por sus efectos calmantes y tonificantes.

Alivia la ansiedda, la depresión y los cambios de humor de forma abrupta y equilibra el sistema nervioso.

Despeja la mente y elimina el dolor de cabeza, frotándolo sobre la nuca y las sienes.

Recomendado para aliviar los trastornos que provoca la menopausia. Tiene propiedades antisépticas y es un excelente desodorante que puede ser agragado en baños.

Adecuado para la piel delicada de los niños.


Pino: Su aroma ayuda a mejorar la respiración, desinfectar las vías respiratorias y purifica el aire en ambiente de fumadores. Es un potente antiséptico, desodorante, desinfectante adecuado para baños de pies, baños de asiento, etc. Refresca la piel.

Estimulante del sistema nervioso, brinda energía y bienestar.

Empleado en aceites para masajes ejerce una acción calmante, antinflamatoria y analgésica, mejorando la circulación.


Pomelo: Posee un aroma refrescante, el cual ayuda a recuperar el ánimo. Promueve la alegría y la confianza, alejando la depresión. Estimula y despeja la mente, energizando el sistema nervioso.

Contraindicado previo a la exposición solar, ya que es una esencia fotosensible que puede provocar manchas i irritaciones en la piel.


Romero: Estimula la memoria, la claridad mental, procesos creativos es un protector psíquico y un estimulante físico. Aclara la mente. Aumenta la memoria (ideal en época de exámenes). Afianza la seguridad en uno mismo. Fuerza de voluntad. Contra el odio y el temor. Protección. Limpieza de personas y casas. Potencia las propiedades mágicas. Felicidad. Armonía. Paz. Para conseguir una relación amorosa. Bendición y consagración.


Rosa: Afrodisíaca. Atracción de amor. Alivia los problemas sexuales de las mujeres. Inspira el sentimiento de paz y felicidad. Elimina las dudas sobre nuestro aspecto y nuestro atractivo. Calma las disputas domésticas. Clarividencia y adivinación. Creatividad. Equilibrio. Liberación. Armonía.


Salvia: Relajante, armoniza la sexualidad por relajante y distiende la energía sexual. Sándalo: propiedades sensuales, meditación, aquieta los pensamientos, es ansiolítico y antidepresivo.


Sándalo: Ideal para los signos que rigen la luna y elementos de aire y agua. Relaja el cuerpo, serena la mente. Induce a la espiritualidad y recogimiento. Es útil para consagraciones y protecciones. Ayuda al desarrollo interior.


Tomillo: Antiséptico de vías respiratorias y antitusivo. Es tónico y energizante en el nivel físico, mental y emocional, mejora la memoria. 


Vainilla: El aroma de vainilla mejora el funcionamiento del sistema nervioso y ofrece calma al individuo, un equilibrio emocional que mejora el estado de ánimo a todos los niveles: Alivia la tristeza, la ansiedad y el estrés.  Fortalece el sistema inmune. Estimula el deseo sexual.Favorece el descanso, mejorando la calidad del sueño.

En cosmética puede ayuda a nutrir la fibra capilar. Hace que el cabello luzca sedoso y con más brillo. 

Es una fuente de antioxidantes, lo que evita la aparición de arrugas y se vuelve un protector muy efectivo frente a los daños externos. 


Vetiver: es un relajante profundo, balancea energía de grupo puede ser afrodisíaco. 


Ylang-Ylang: Antidepresivo y sedante, actúa sobre dificultades sexuales, por estrés y ansiedad, es utilizado en estados de tensión nerviosa, insomnio e hiperactividad.


      Uso de los Aceites Esenciales


El método más indicado para el hogar, salas de meditación, consultorios, etc. es el hornillo, con el calor de una vela se calienta un pequeño cuenco de cerámica en donde se coloca agua y de 5 a 10 gotas de aceites esenciales.Se puede utilizar colgantes de cerámica en el cuello o llevar un pañuelo con la esencia elegida, existen unos aros de cerámica que se colocan en los veladores y allí se ponen las gotas de los aceites preferidos con el calor de la lampara se evapora el aroma y ambienta el lugar.


En caso del contacto con la piel el aceite penetra por los poros de la misma ingresando al sistema interno, allí debe diluirse en aceites neutros como el de germen de trigo, sésamo, almendras o en cremas neutras y usarlo en masajes.Cuando los aromas se diluyen en aceites se pueden utilizar como perfumes. También se puede utilizar el aceite en baños de inmersión colocando de 10 a 15 gotas en el agua. Cuando las combinaciones persiguen fines terapéuticos es importante tener en cuenta:


· no mezclar aceites esenciales con efectos opuestos 

· no usar más de 3 o 4 aceites 

· la mezcla debe ser agradable para la persona


Los aceites utilizados correctamente para aromaterapia no producen ningún efecto desagradable ni contraindicaciones, de todos modos debemos tener en cuenta:


· No ingerirlos 

· No exceder la cantidad de gotas ni el tiempo de uso. 

· No utilizar en el embarazo: albahaca, alcanfor, mejorana, mirra, clavo de olor, hisopo, enebro, cedro, salvia, romero.

· No poner en contacto directo con la piel: canela, clavo de olor, bergamota, canela, enebro, jengibre, limón, menta, pino, tomillo. 

· No usar en caso de epilepsia: romero salvia. · No dejar ninguna esencia al alcance de los niños. 

· No tomar sol después de usar sobre la piel: bergamota, pomelo, naranja, limón, cedrón, angélica.